Uno de los motivos principales por los cuales comencé este blog es para tratar de reducir la infoxicación que se genera gracias al exceso de información sobre el marketing digital.
Para mí, el principal problema de la “sobre población” que existe respecto a los blogs dedicados a este tema, es que muy pocas veces se ponen de acuerdo en lo que publican.
Esto naturalmente merma el avance de todos los que estamos intentando aprender de manera autodidacta, puesto que confunde sobre las medidas que se deberían tomar para determinado asunto.
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Por ejemplo está ese debate entre la extensión que debería tener un texto. Algunos bloggers dicen que 300-500 palabras, otros de 800-1000 y de 1500 a 3000, pero ¿Cuál es la ideal?
Para mí la respuesta es simple y es la que deje satisfecho a tu lector. Si eres capaz de resumir lo que necesita en 300 palabras, esa está genial, pero si necesitas ir a las 3000 mil, también está bien.
El problema viene cuando se habla de la redacción SEO, caso en que, según los expertos, hay que utilizar textos largos para que sean indexados por los buscadores.
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Sin embargo, recordemos que la redacción SEO es sólo uno de los múltiples factores de posicionamiento, por lo que debes enfocar tus textos al usuario.
En fin, si llevas un tiempo ya en el mundillo del marketing digital seguro has escuchado este término antes, pero ¿Qué es la infoxicación y cómo podemos disminuirla? Veamos.
¿Qué es la infoxicación?
La sobrecarga informativa o infoxicación –también conocida como infobesidad- es un concepto que se utiliza para hacer referencia al exceso de información que se genera en distintos medios de comunicación, en especial el internet.
La palabra en sí parece muy novedosa, pero según las fuentes, el término en inglés –information overload– fue acuñado en 1970 por Alvin Toffler en su libro Future Shock. Aunque otros blogs señalan que fue Alfons Cornella en 1996.
La infoxicación es el exceso de información que impide profundizar en un tema en concreto.
Todos lo hemos vivido, ¿Cuántas veces no hemos revisado nuestra bandeja de entrada con cientos de emails? ¿Cuántas veces vemos publicada una noticia viral en infinidad de páginas web?
Esto por supuesto no sólo genera descontento entre los usuarios, sino que acarrea algunos otros problemas que pueden resultar más perjudiciales en esta Era de la información.
Problemas de la infoxicación
Para mí, las consecuencias que tiene esta sobrecarga informativa se reflejan hoy más que nunca en nuestra sociedad, ya que, al existir tal cantidad de información, al final las personas resultan mal informadas y engañadas.
Seguro estarás pensando “a mí esto no me pasa”, pero te sorprendería conocer el nivel de personas que al enfrentarse a ese mundo de contenido, no investigan fuentes y por supuesto se creen la primera “verdad” que les cuentan.
Ejemplos hay miles, el primero que se me ocurre viene en forma de las fake news que diariamente circulan por redes sociales, foros, blogs y páginas web.
Pero la infoxicación no se detiene allí, tenemos también a los medios de comunicación, foros, buscadores y vaya, casi en cada rincón de la web, especialmente cuando se hace viral.
Otro problema que creo existe a nivel personal, es que, cuando se sobrecarga de información a un usuario, generalmente éste deja de consumirla o simplemente termina abrumado.
En cuanto al sector empresarial, también existen numerosas complicaciones debido a que se vuelve mucho más difícil encontrar la información necesaria debido al exceso de contenido.
¿Cómo se genera la infoxicación?
Hay decenas de factores que pueden favorecer el desarrollo de la sobrecarga informativa, pero todo se resume a la facilidad que existe para crear contenido.
No me mal entiendas, estoy completamente a favor de que cada quién pueda crear su propio contenido y subirlo a la web; a decir verdad lo considero un privilegio.
Sin embargo, creo que también deberíamos ir pensando en construir un internet más responsable en cuanto a la creación de contenido se refiere, por ejemplo evitando el spam o el clickbait.
Esto que a priori puede sonar algo utópico, ya no lo es tanto, gracias a que cada día el usuario de internet evoluciona y se hace más consciente de los contenidos que consume.
¿Cómo se puede disminuir la infoxicación?
Ahora que establecimos que el exceso de información no significa que la gente esté informada, toca ver una pregunta crucial: Cómo rayos la evitamos.
Para mí, existen tres puntos clave:
- Confirmar cualquier nueva información que llegue a tu poder. Para esto debes buscar una fuente primaria, es decir, donde se origina la información.
- Comparar toda la información que llegue a tus manos, no te quedes con una sola versión, forma tu propio criterio.
- Evitar distribuir información basura –aquella que desinforma o sólo satura redes y/o correos-.
Pero estos no son los únicos, puedes vaciar tu feed de rss y sólo dejar las actualizaciones de los medios que te presentan la información más fidedigna.
También puedes dejar de seguir algunas páginas web o redes sociales, incluir filtros en tu correo o enviar directo a la carpeta de spam.
En Twitter puedes crear listas y en Facebook en Instagram puedes activar notificaciones. Además te recomiendo dejar en tu agenda un momento específico para leer y buscar información.
Todas estas acciones reunidas seguro irán reduciendo el nivel de información que recibes todos los días y créeme que esto se vuelve deseable a la larga.
La infoxicación quizá sea imparable en este nuevo mundillo digital, sin embargo, depende de cada uno reducirla, al menos, para nosotros mismos.
Foto de portada: https://www.limawell.edu.pe/